En la ciudad sueca de Eskilstuna, a 100 kilómetros al oeste de Estocolmo, los compradores acuden en masa a un centro comercial con un giro inesperado. ReTuna Återbruksgalleria es un centro comercial dedicado íntegramente a productos reparados y reciclados.
Se inauguró en 2015 y se distingue de lo que podría llamarse una venta de garaje de lujo reuniendo otros elementos vitales del centro comercial: hay 14 tiendas, un restaurante, un área de exposición, instalaciones para conferencias e incluso una escuela de formación para estudiar el reciclaje.
Como se describe en el blog Make Wealth History, el personal del depósito de reciclaje intercepta y clasifica los productos entrantes a medida que se dejan, dejando de lado aquellos que pueden repararse o restaurarse.
Estos artículos se pasan luego a los talleres para ser renovados y vendidos en puntos de venta especializados para todo, desde muebles y materiales de construcción hasta computadoras y ropa.
Los compradores de ReTuna Återbruksgalleria tienen motivos para sentirse bien con sus compras: contribuyen a la economía circular, un modelo industrial alternativo que nos alienta a hacer más con menos a medida que los recursos del mundo se vuelven cada vez más escasos. Es un concepto muy aclamado por el Foro Económico Mundial, que en su informe de 2014 Hacia la economía circular argumentó que "la generación continua de riqueza requiere un nuevo modelo industrial que es menos dependiente de la energía primaria y los materiales"